Daniel Orviz y Violeta Castaño Ruiz nunca prometieron ser grandes, pero nos deslumbraron a versos.
Y nadie sabe lo que sufre un tornillo y me quiero siempre vuestra, una fusión de versos de ambos géneros, con registros muy diferentes, caras jóvenes con poemas maduros, donde nunca se pone el sol.
La tarde del miércoles 16 de marzo se nos puso escuchando sus leves promesas, nunca hechas, pero transgresoras del sistema en un "Quiéreme" (a pesar de la aburrida vida que nos espera), rebeldes con los roles que nos toca vivir en esta sociedad, donde todos los finales riman.
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Daniel y Violeta,
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2 comentarios:
Gracias! Fue una tarde muy agradable!
Saludos!
También muchas gracias por mi parte, fue un grato placer estar con vosotros. Abrazos!
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